Los nombres de las plantas
Desde los tiempos más remotos, los humanos han dado nombre a todas las cosas de su entorno y entre ellas las plantas, especialmente aquellas que tenían alguna utilidad, como ser comestibles, medicinales, etc. Es muy importante nombrar las plantas porque así podemos pasar la información a otros. Sin embargo, para que esta información sea efectiva hace falta que todos llamemos a cada planta de la misma manera, si no, tendremos un problema.

En Ornitología, se ha llegado a un acuerdo con los nombres comunes en español de la mayoría de las aves. Asociaciones como SEO (Sociedad Española de Ornitología) y otras, han hecho una gran labor de difusión, de manera que en España, cualquier aficionado, cuando le nombran al «Cormorán grande», p.e., sabe exactamente cual es el ave. Desgraciadamente no ocurre lo mismo con las plantas, excepto unas pocas muy comunes y muy extendidas, como el romero o algunos árboles. Muchos nombres comunes son muy locales y a veces el mismo nombre se refiere a plantas distintas en otras zonas. Por otro lado hay muchas plantas que por no tener utilidad directa para el hombre, no tienen nombre común en español.

Por todo ello, ya desde el S. XVIII con Linneo, se adoptó una forma de nombrar más científica: cada especie de planta tiene un nombre y solo uno. Se forma con dos palabras que se refieren a género y especie, en latín y se escriben en «cursiva».
En conclusión, si queremos adentrarnos un poco más en este mundo de las plantas, tenemos que acostumbrarnos a su nombre científico. En un principio parece una tarea imposible para un aficionado, pero pronto te das cuenta que muchos nombres describen características de la planta y recuerdan a las palabras en español, al fin y al cabo nuestro idioma tiene sus raíces en el latín. Por ejemplo: Fraxinus angustifolia, es el fresno de hoja estrecha (angusti– estrecho, folia-hoja). Si pensáis que es difícil, imaginad lo que puede ser para un japonés o un hindú, cuyos idiomas son totalmente diferentes. Sin embargo, si les dices el nombre científico ¡ellos sabrían el árbol a que os estáis refiriendo!
Parece que el problema estaría resuelto, pero no es exactamente así. La mayoría de plantas tienen su nombre científico único aceptado, pero unas pocas han cambiado con el tiempo, por diversas razones como que ya estuviesen descritas antes con otro nombre en otro país, o que los análisis genéticos las hacen pasar de un género a otro. Por ello en esta página hemos seguido siempre la nomenclatura del Herbario de Jaca, que es el centro de referencia para Aragón en cuanto a plantas. Si se consultan otras fuentes los nombres de algunas plantas, pueden cambiar, siendo considerado el nombre del Herbario de Jaca, un sinónimo del otro nombre de la especie.